viernes, agosto 31, 2007

Quisiera escribir la historia de Tita

Quisiera escribir la historia de Tita (“Como agua para chocolate”), pero alguien se me adelantó, o quizás ya es muy antigua y se ha repetido millones de veces en el espacio y en el tiempo.

Tita tragó todas sus cerillas para provocar al fin lo que jamás consiguió en vida. Vivió muchos años cocinando la esperanza con pétalos de rosas (siento si le estoy jodiendo a alguien la novela).

Yo hoy me siento un poco Tita.

Hago rosas con mis manos.

Creo sueños al cerrar los ojos.

Vivo lo que me toca tejiendo mi inmensa colcha de colores, tan larga como una vida.

Y lloro con las cebollas, y río cuando mis pétalos consiguen cambiar las mentes con magia y dotarlas de amor y de luz.

Esos pétalos hicieron que su hermana cabalgara desnuda a lomos de un caballo agarrándose a un jinete a quién amaba.

Vivo una vida que no comprendo, sólo sé que hay que vivirla.

Y a colación de Amanda… “La vida es eterna en cinco minutos”, lo malo es cuando llega el número seis (sonrío con cierta tristeza, tú Megane sabes de qué hablo).

En el caso de Amanda no hubo vuelta atrás. A mi me queda la esperanza. Toda una vida.

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viernes, agosto 24, 2007

Día raro nº 67, "Amanda"... Al fin

"Te recuerdo Amanda", Víctor Jara

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Gracias Amor, me hiciste recordar esta hermosa canción... Tan lejana, tan rara... Y yo una niña. Al fin la encontré. No, trístemente no es alegre.

Pero... "Te recuerdo, Amanda".

Y ahora por fin puedo marchar a la cama con algún trozo más resuelto de este inmenso rompecabezas que es cuánto me rodéa y siento. Abrir mi mente y dejar que la energía del universo me penetre hasta invadir mi cuerpo y quedar dormida... Si tú supieras, Amanda... Cuántas cosas habrás conseguido sin saberlo, sin existir. Quizás.

miércoles, agosto 22, 2007

"Para tí, Alejandra"


"Será mejor"

Muchachito Bombo Infierno, Vamos que nos vamos, "Será mejor" El día que tu me quieras me dejo de fumar,

El día que tú me quieras me dejo de estrujar,

El día que tú me quieras me dejo de brindar,

Será mejor que no me quieras más.

El día que tu me quieras me dejo de vivir,

El día que tu me quieras me dejo de existir,

El día que tu me quieras me dejo de vivir.

Será mejor que no me quieras a mí.

Será mejor, será mejor,Será mejor que no me quieras más.

El día que tu me quieras que me quieras de verdad,

El día que tu me quieras de una forma habitual,

El día que tu me quieras cuando yo te quiera más,

Será mejor que no me quieras más.

El día que tu me quieras...

Día raro nº 66, Retrato y canción

Tus clavículas forman parte del impresionante esqueleto que te sustenta, enredadas en un corazón herido y enorme dan forma a tu pecho, extendiéndose como cartílagos mágicos hasta unas manos que desprenden luz.

Mar Cantón

"Red Hill Mining Town", U2




viernes, agosto 17, 2007

Seres Grises

"...porque seguimos siendo y somos humanos, y debemos hablar desde esas fronteras licuadas para poder revolucionar la división y clasificación, que a fin de cuentas son corsés que nosotros mismos nos ponemos. La sirena roja del sueño de Mar, y la sirena gris sin cola del despertar son la misma, y una a otra se dan fuerza, alegría, tristeza o dolor. El rojo y el gris se mezclan, a veces domina uno, otras otro, otras son equitativos, formando la gama de colores que es la vida".

Nieves Soriano

"Corsés que nosotros mismos nos ponemos", alas que nosotros mismos nos cortamos (a veces con lápices sin punta).

Hemos venido, ante todo para ser felices porque además, es el único modo de transmitir felicidad a cuántos nos rodéan, pero nos empecinamos en "ser políticamente correctos", en dejarnos guiar por las masas, culturas, religiones, costumbres, prejuicios... Para justificar nuestro miedo ante el cambio, y peor si cabe, cuando el cambio es deseado o anhelado desde lo más profundo, convitiéndonos así en seres grises que vagan por el mundo sin horizonte, curiosidad, preguntas... Con miedo a VIVIR.

Seres que se limitan a consumir oxígeno y que se conforman con aquello de lo que la naturaleza nos ha dotado sin preguntarnos si lo queremos o no, la capacidad de soñar dormidos: porque son incapaces de soñar despiertos. Eres un genio Nieves. Te admiro. Un beso, Mar.

Mar Cantón.

Y a colación de estos comentarios pertenecientes a "La sirena desterrada" y de una imagen (la que muestro) que siempre me hizo sentir al verla, hablo de "los seres grises", de los cobardes, de todos aquellos trozos de carne sin alma que nos rodéan, y no son Bush, ni Al Qaeda... Pueden ser nuestros vecinos, nuestros familiares, nuestros amigos. Personas que pasan por la vida como si ésta no fuera más que un camino que hay que recorrer por narices, cargando con millones de cosas que no les gustan, olvidando sus sueños, encerrando sus almas.

Son seres transparentes, difuminados, en definitiva fantasmas que se dejan arrastrar por el viento. Algunos cargados de miedo o cobardía, otros a los que ya ni siquiera les queda eso y te miran por encima del hombro si les dices que amas, que disfrutas con un amanecer, que la vida es un regalo... Y piensan: "pobre loca imbécil, no tiene ni idea de que la vida sólo son facturas, hipotecas, una señora/señor esperando en casa para ponerme la cabeza como un bombo y unos hijos que salen por un huevo y que no paran de darme el coñazo, trabajo, no acordarse de lo que es el amor, ¿Amor? Estás tonta, eso son pamplinas de adolescentes...".

Vacío, ocuridad, ocquedad... Y los miras con tristeza a sus ojos grises y equivocados, y sientes pena, porque están ya tan perdidos que el lenguaje es absolutamente incomprensible por ambas partes.

Hoy dedico mi día a los seres grises que este autor anónimo y sevillano retrató tan bien en ese muro.

Y brindo porque un día cualquiera de ellos, sea capaz de quitarse la camisa de fuerza, de sentir la libertad, la alegría y el dolor.

La vida.

"Lo imposible es el fantasma de los tímidos y el refugio de los cobardes"

Napoleón Bonaparte (sacado de un azucarillo...)

"La Canción del Elegido, Silvio Rodríguez"

martes, agosto 14, 2007

RESURRECCIÓN

... Y fue cuando tuve una revelación absoluta: Dios aparentó robarme lo que más necesitaba para poder conocerme y continuar el camino.


Cerró mis ojos y abrió mi alma.


Me hizo sentir la energía en mis manos.


Nunca ha merecido tanto la pena vivir.


Y tras un mes de pesadilla, y otras hermosas experiencias, aquí estoy de nuevo (Cuántas cosas pueden pasar en 30 días), con más fuerza que nunca.

Espero.

Y, ...... Ufff, cómo merece la pena...

Un beso a todos, os echaba de menos.




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